Rafael Vara y su Armario del Tiempo

Interrumpimos la programación habitual por culpa de un ataque de nostalgia.

Y porque el dibujo de Resident Evil se me resiste, vamos, que me está costando una barbaridad hacerlo y no sé por qué.

El caso es que estoy teniendo una temporada de películas de animación que no es normal. Quizá porque me resisto a crecer (¿complejo Peter Pan? Ugh...) o porque simplemente disfruto mucho viendo dibujos animados en 2D tras estar años y años tragando 3D en cine y en casa.

Empecé viendo los cortos de Mafalda que me ha pasado mi colega Pedro gracias a la oferta de El Público, y buscando la película de susodicho personaje volví a reencontrarme con los dibujos de Mortadelo y Filemón dirigidos por Rafael Vara.

Digo esto porque no quiero que nadie se confunda y piense que me refiero a la serie de animación de los años 90 que emitía la Antena 3 Televisión. No, yo me refiero a los cortos de los años 70, que componían dos Festivales bastante majos y una especie de película llamada El Armario del Tiempo.

Los Festivales estaban bastante bien, unos cortos al uso que no tenían nada que envidiar a muchos de los que se veían por esa época (que no fueran los de Disney o los de la Warner, claro). Pero los del Armario del Tiempo me parecen lo mejor que se ha hecho de Mortadelo y Filemón en animación, y con diferencia.

Aún habiendo envejecido un poco mal (admitámoslo, la animación no es prodigiosa en ese largometraje compuesto de varios cortos colocados de forma cronológica) es muchísimo mejor que la serie que adaptaba los álbumes de Francisco Ibáñez, cuyos movimientos eran aún peores, el doblaje pésimo, la música aún peor, el encuadre siempre el mismo (se veía SIEMPRE a los personajes pequeños, colocados en un fondo vacío y monótono) y los gags muchísimo menos graciosos.

Mucha gente se queja de que no se basen fielmente en los cómics originales, que no sacaron a Bacterio y en su lugar metieron a Chiflágoras (que me parece más divertido, por su carácter y tartamudeo) pero creo que el Armario del Tiempo gana mucho precisamente por eso, porque Rafael Vara fue un guionista excelente, con mucha imaginación y personalidad propia, quizá a la altura del propio Ibáñez. Y lo digo porque las situaciones en las que metía a los personajes, los diálogos y hasta las parodias resultan muy divertidas, siendo mi favorita la del Conde Mácula, que me parece el mejor corto de todos.

Sé que más de uno, amante de la animación de primera fila, me dirá que hoy en día estos dibujos son una porquería. Cosa que no comparto en absoluto, y es que es una de esas pocas cosas que disfrutaba tanto de pequeño como de adulto. Y por algo será.

Me pregunto qué fue de Rafael Vara, ganó premios por los Festivales de Mortadelo y sin embargo desapareció del campo de la animación. Quizá no daba para comer en aquella época.

Saludos.