Bueno, como prometí... Mi lista de los 10 mejores cómics del año. Obviamente, los que han sido NOVEDAD este año, nada de reediciones y demás, sólo y exclusivamente cosas que no habíamos visto hasta estos últimos 12 meses. Vamos allá:
10- Ares, la miniserie: Cuando tienes que dejar de lado diferentes miniseries como Los Libros de Muerte, World War Hulk o el Adam Strange de Pasqual Ferry, es sinónimo de haber tenido un buen año de cómic. Al final la de Ares ha sido la victoriosa, por ser tan épica, divertida y por ser, ante todo, una epopeya bélica que recuerda a las famosas guerras de Dioses griegos. Muy recomendable, sin duda.
9- La Guerra de los Sinestro Corps: Más guerra y más épica. Groucho estaría contento. El caso es que esta es una batalla cósmica muy bien dibujada y escrita que va a más a cada número que avanza. Además, es emocionante comprobar cómo la moral puede distorsionarse en los momentos límite. Descubre cómo un villano puede perder una guerra... y a la vez ganarla.
8- Complejo de Mesías: Otro relato épico, aunque más dramático y crudo. No es que el resto sean cuentos para niños precisamente, pero digamos que aquí se masca la tragedia en todas las viñetas de este fantástico crossover. Vemos muertes, vemos heridos, vemos situaciones límite, traiciones... La peor hora de los mutantes en el momento cumbre de su extinción. Todos los personajes aportan su granito de arena en unos números que demuestran que las ideas de los 90 no eran malas, sino que estaban mal desarrolladas y empleadas.
7- Thunderbolts de Ellis y Deodato Jr: Esta es muy simple: Despiporre puro y duro. Civil War se ha convertido en una muy buena idea en cuanto podemos ver cosas impensables como Norman Osborn con un equipo de villanos a su cargo cazando a los superhéroes no registrados. Gente peligrosísima como Veneno o Bullseye a las órdenes de un esquizofrénico. ¿Alguien da más?
6- Capitán América: La serie regular que nos ha dado el momento del año: La muerte de su propio protagonista. O cómo ver un golpe de efecto muy facilón convertirse en una trama apasionante donde el reparto coral se vuelve imprescindible y muy interesante. Comprobar cómo otro personaje coge el manto del Capitán América y todas las repercusiones que hay detrás es toda una gozada.
5- One Piece: Casi no la pongo en esta lista porque este año apenas han sacado tomos de la serie. Por suerte, Planeta se puso las pilas estos últimos meses y hemos podido ver el final de la saga de Water Seven, saga que demuestra por qué este manga es uno de los mejores shonen de la época. Y esto es debido a que sigue manteniendo ese espíritu de aventura y emoción que podíamos ver en los primeros tomos.
4- MAX Punisher: Principalmente está aquí por el tomo de Las Viudas. Una historia cruda de venganza y depresión que desmitifica por completo la figura de Frank Castle como asesino de asesinos. ¿Puede todo el mundo ser como él? ¿Puede realmente un ser humano vivir una vida de sangre y muertes sin sentir otra cosa que odio? Garth Ennis escribe una de las mejores historias que jamás haya leído de Punisher.
3- Shazam de Jeff Smith: El lado opuesto del cómic anterior. Esta es una historia casi infantil de un superhéroe típico cuyo espíritu lo posee un niño huérfano con un corazón de oro inquebrantable. Entonces... ¿por qué está en esta lista y tan alto? Porque es uno de esos cómics con alma, que calan hondo y que resulta tan entrañable que te devuelve ese niño interior que todos escondemos en cuanto nos hacemos adultos.
2- 52: Atípica colección de DC de 52 números en la que los secundarios de esta editorial cobran un gran protagonismo en un año donde Batman, Superman y Wonderwoman andan desaparecidos. Sin duda uno de los mejores cómics del año al ofrecer muchas historias con momentos inolvidables. Mención aparte merece la trama de Black Adam y su familia, casi insuperable.
1- El Inmortal Puño de Hierro: Ni siquiera estaba en la lista hasta que me lo leí hace unos cuatro días. Y a cada momento que recuerdo los dos tomos que han salido en España de esta serie... más me gusta. Un clásico moderno, sin lugar a dudas, que ofrece todo un universo de ficción que nunca antes ha existido alrededor de este personaje. Imprescindible para todos aquellos amantes del cómic de superhéroes urbano, de ninjas, pulp (al estilo Tom Strong, para entendernos) y de acción oriental. Lo tiene todo, señores.
Felicitar también a Stan Lee por su cumpleaños, ya que es una leyenda viva que ha dejado huella en muchos. Creador de Spider-man, los 4 Fantásticos, los Vengadores y demás gentucilla superheróica, sólo Tezuka y Walt Disney pueden codearse con este gran creador de personajes.
Saludos.
P.D. Un día de los inocentes bastante bueno, la verdad. Gracias a unos colegas que, aunque me hacen de rabiar, siempre están ahí. Y yo que lo agradezco.
10- Ares, la miniserie: Cuando tienes que dejar de lado diferentes miniseries como Los Libros de Muerte, World War Hulk o el Adam Strange de Pasqual Ferry, es sinónimo de haber tenido un buen año de cómic. Al final la de Ares ha sido la victoriosa, por ser tan épica, divertida y por ser, ante todo, una epopeya bélica que recuerda a las famosas guerras de Dioses griegos. Muy recomendable, sin duda.
9- La Guerra de los Sinestro Corps: Más guerra y más épica. Groucho estaría contento. El caso es que esta es una batalla cósmica muy bien dibujada y escrita que va a más a cada número que avanza. Además, es emocionante comprobar cómo la moral puede distorsionarse en los momentos límite. Descubre cómo un villano puede perder una guerra... y a la vez ganarla.
8- Complejo de Mesías: Otro relato épico, aunque más dramático y crudo. No es que el resto sean cuentos para niños precisamente, pero digamos que aquí se masca la tragedia en todas las viñetas de este fantástico crossover. Vemos muertes, vemos heridos, vemos situaciones límite, traiciones... La peor hora de los mutantes en el momento cumbre de su extinción. Todos los personajes aportan su granito de arena en unos números que demuestran que las ideas de los 90 no eran malas, sino que estaban mal desarrolladas y empleadas.
7- Thunderbolts de Ellis y Deodato Jr: Esta es muy simple: Despiporre puro y duro. Civil War se ha convertido en una muy buena idea en cuanto podemos ver cosas impensables como Norman Osborn con un equipo de villanos a su cargo cazando a los superhéroes no registrados. Gente peligrosísima como Veneno o Bullseye a las órdenes de un esquizofrénico. ¿Alguien da más?
6- Capitán América: La serie regular que nos ha dado el momento del año: La muerte de su propio protagonista. O cómo ver un golpe de efecto muy facilón convertirse en una trama apasionante donde el reparto coral se vuelve imprescindible y muy interesante. Comprobar cómo otro personaje coge el manto del Capitán América y todas las repercusiones que hay detrás es toda una gozada.
5- One Piece: Casi no la pongo en esta lista porque este año apenas han sacado tomos de la serie. Por suerte, Planeta se puso las pilas estos últimos meses y hemos podido ver el final de la saga de Water Seven, saga que demuestra por qué este manga es uno de los mejores shonen de la época. Y esto es debido a que sigue manteniendo ese espíritu de aventura y emoción que podíamos ver en los primeros tomos.
4- MAX Punisher: Principalmente está aquí por el tomo de Las Viudas. Una historia cruda de venganza y depresión que desmitifica por completo la figura de Frank Castle como asesino de asesinos. ¿Puede todo el mundo ser como él? ¿Puede realmente un ser humano vivir una vida de sangre y muertes sin sentir otra cosa que odio? Garth Ennis escribe una de las mejores historias que jamás haya leído de Punisher.
3- Shazam de Jeff Smith: El lado opuesto del cómic anterior. Esta es una historia casi infantil de un superhéroe típico cuyo espíritu lo posee un niño huérfano con un corazón de oro inquebrantable. Entonces... ¿por qué está en esta lista y tan alto? Porque es uno de esos cómics con alma, que calan hondo y que resulta tan entrañable que te devuelve ese niño interior que todos escondemos en cuanto nos hacemos adultos.
2- 52: Atípica colección de DC de 52 números en la que los secundarios de esta editorial cobran un gran protagonismo en un año donde Batman, Superman y Wonderwoman andan desaparecidos. Sin duda uno de los mejores cómics del año al ofrecer muchas historias con momentos inolvidables. Mención aparte merece la trama de Black Adam y su familia, casi insuperable.
1- El Inmortal Puño de Hierro: Ni siquiera estaba en la lista hasta que me lo leí hace unos cuatro días. Y a cada momento que recuerdo los dos tomos que han salido en España de esta serie... más me gusta. Un clásico moderno, sin lugar a dudas, que ofrece todo un universo de ficción que nunca antes ha existido alrededor de este personaje. Imprescindible para todos aquellos amantes del cómic de superhéroes urbano, de ninjas, pulp (al estilo Tom Strong, para entendernos) y de acción oriental. Lo tiene todo, señores.
Felicitar también a Stan Lee por su cumpleaños, ya que es una leyenda viva que ha dejado huella en muchos. Creador de Spider-man, los 4 Fantásticos, los Vengadores y demás gentucilla superheróica, sólo Tezuka y Walt Disney pueden codearse con este gran creador de personajes.
Saludos.
P.D. Un día de los inocentes bastante bueno, la verdad. Gracias a unos colegas que, aunque me hacen de rabiar, siempre están ahí. Y yo que lo agradezco.
1 comentario:
No he leido, ni Ares, ni One Pierce, ni Punisher (intente pillar ese tomo, ya no quedaba en León, y pase de que me pidieran uno, la verdad, detesto al personaje), de lo demás bueno hay algunas que coincidimos en el top, de las que no, pues si me gustaron todas las que mencionas, si señor.
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