
Por otro lado, he visto otra película de la Hammer, esta vez sin Dracula y sin Christopher Lee:
- Las Novias de Drácula: Una sorpresa más que agradable, después de tragarme bodrios como Los Ritos Satánicos o Vuelve de la tumba, al fin vuelvo a ver una película de vampiros como Odín manda, con todos los elementos que hacen especiales este tipo de historias de época.
Aparte de contar con un guión muy atractivo (trata muy sutilmente el vampirismo con cosas como el incesto o incluso la bisexualidad, un escándalo para aquella época), repleto de momentazos para el recuerdo (como cuando Helsing dice a una vampiresa que hay una manera de descansar, por no hablar de cierto inesperado mordisco), se nota que es una película de Terence Fisher de principio a fin. No sé qué tendrá este director, pero el muy cabrón se las apañaba para hacer unas localizaciones y un ambiente asombrosos con muy poco dinero. Y encima rodando es un alumno aventajado de Hitchcock, porque momentos como el juego de espejos cuando entra cierto vampiro en la habitación de la muchacha son de infarto.
En definitiva, si no es la mejor película de vampiros de la Hammer poco le falta. ¡Y eso que no sale Drácula! Muy recomendable, sobre todo para los fans del género.
Miedo me da la Condesa Dracula, y no en el sentido terrorífico, no. No creo que esté a la altura.
Saludos.
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